Night Citrus
Administrador | Mago ilusionista
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 | Tema: El Ayuntamiento y los Cuarteles de la Guardia  Jue Ago 27, 2009 9:03 am | |
| Ayuntamiento de la ciudad de Athion Alcalde: Hansel F. Burges
"El Ayuntamiento es un edificio de unos 15 pisos de alto, y unos 100 metros de ancho por 40 de largo. De aspecto externo clásico y funcional, pero con ventanas de estilo gótico y un reloj en lo alto de la torre de la fachada frontal (pues el ayuntamiento tiene una parte central con forma de catedral y dos alas con forma rectangular). Externamente es elegante y quizas un pelín sobrio. Internamente el suelo se compone de baldosas blancas y negras (motivo de damero) para todo el edificio, a excepción del ala oeste, donde se encuentran los cuarteles de la milicia y que se componen casi enteramente de piedra gris, dándole a esa ala en concreto un aspecto bastante "medieval". Con todo el ala oeste está dividida en habitaciones individuales, así que cada recluta puede disponer de su propio cuarto para sus necesidades personales. Los baños son comunales. Tanto el ala oeste como el ala este se componen solo de 3 pisos, siendo en el ala oeste el primero para hombres, el segundo para mujeres y el tercero para oficiales. Se desconoce qué usos podrá tener el ala este del Ayuntamiento."
Información adicional: Sobre los cuarteles:
- Spoiler:
Los milicianos que estén enrolados como "guardia de la ciudad" podrán rolear en el Ayuntamiento como si estuviesen en sus propias habitaciones. Asimismo podrán rolear como que reciben visita en sus respectivos cuartos (aunque recordad que los cuartos de los guardias son individuales, por tanto, pequeños. Los guardias en sus días libres prefieren encontrarse con sus compañeros en otros lugares mas "acogedores"). Sin embargo existe un "toque de queda" que se ha de respetar a rajatabla, a partir del cual los guardias no pueden recibir visitas ni salir de sus respectivas plantas. Obviamente, las visitas por parte de hombres a la planta de las mujeres con fines pervertidos (y visitas de mujeres a la planta de los hombres con los mismos fines) esta tan tajantemente prohibidas que se rumorea que los oficiales que descubren estas irregularidades se dedican a inventar un castigo nuevo cada vez que suceden, cada cual más terrible e insufrible que el anterior.
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